Eh, Stoner es el Líder

Vuelvo hoy mismo para casa de EEUU, así que he estado un poco desconectado (escribo desde el aeropuerto McCarran de Las Vegas). Por temas de horarios no comenté nada de Laguna Seca, pero creo que no hacía mucha falta. Como pensaban en Michelin el sábado por la noche, nadie vio a Casey Stoner, en una carrera bastante aburrida. Sé que se habla, o hablamos, mucho del tema neumáticos, y personalmente creo que está siendo un factor demasiado determinante. Aún así, también pienso que el australiano es el más fuerte de este año. Rossi y Pedrosa hicieron una gran carrera el otro día. Están a años luz de distancia del resto de Michelin, y también me da que por encima de alguno que les precedió, tipo Vermeulen o Melandri (cojo). En ese punto puede que sea en el que se desnaturalice el campeonato. No me gustan los efectos que aparentemente está teniendo la nueva regla de neumáticos, sobre todo porque hemos visto pocas grandes carreras. La única con lucha de verdad fue Montmeló y, no lo olvidemos, ganó Stoner. Es rápido (desde el minuto 1 de los entrenamientos está arriba) y tiene la cabeza muy bien puesta (no ha cometido errores). La GP7 de Ducati es una gran moto (yo no me apunto a la teoría de preguntar por qué entonces Capirossi no va, porque son pilotos muy distintos); Bridgestone está ganando a Michelin, como en el pasado hacían los franceses con los japoneses; y Stoner ha sacado todo lo que lleva dentro (tampoco olvidemos que, hasta este año, no ha tenido un apoyo de garantías en su carrera como lo ha tenido Rossi en Yamaha, Honda o Aprilia, o Pedrosa en HRC). Por eso digo que Stoner es el Líder, con mayúscula.

Pd: Dos detalles interesantes de Laguna Seca. Todos quieren huir de Honda, pero la RC212V no es tan mala, y mejorará. Será listo el que la pille para el año que viene. El otro, el carrerón de Vermeulen, en un circuito que se le da de maravilla.

Laguna Seca

De partida voy a decir una cosa sobre Laguna Seca: es un circuito muy cutre, si entramos en la dimensión de compararlo con los que normalmente albergan las pruebas del Mundial. Los accesos están anticuados, los servicios son del pleistoceno, no hay carril de emergencia (para entender las consecuencias sólo hay que fijarse en cómo lo pasó Hofmann el viernes)... Pero Laguna Seca tiene muchísimo encanto. Se respira motor, se vive un ambiente motero espectacular, una fiesta. Los boxes del circuito sólo albergan a los equipos de MotoGP. En el paddock están las carpas del resto de competidores, los del AMA Superbikes y Supersport. Ves cosas como un mismo piloto compitiendo en categorías distintas. Sólo hay que ver a Chaz Davies o Roger Hayden, que se van a hacer MotoGP después de haber corrido ayer la de AMA Supersport (por cierto, ganó Hayden). Hay un montón que doblan SBK con Supersport, y uno como Miguel Duhamel se hace hoy el warm up de MotoGP, el entrenamiento oficial de SBK, la carrera de MotoGP y luego la de SBK. Una pasada. Reconozco, también, que me emocioné el viernes viendo por primera vez in situ el sacacorchos. Lees mil veces una cosa, y te la cuentan por activa y por pasiva, pero en este caso no perdió ni una pizca de interés.

Falta una hora y media para la carrera. Como siempre, y por suerte, es difícil hacer una predicción. Si no llega a caerse ayer por culpa de Roberts, estoy seguro de que Melandri habría estado ahí. Los cuatro nombres que más suenan son Stoner, Vermeulen, Pedrosa y Rossi. Rossi se incluye porque siempre da la sensación de que puede estar. Pedrosa después de su regreso en Alemania. Pero los más fuertes han sido los dos australianos, sobre todo el líder. Hay un factor más, los neumáticos. Esta vez no hace tanto calor como otros años, dicen, y tampoco tanto como en Sachsenring. Así que en Brisgestone respiran tranquilos. Y parece que, al tener que montar un neumático más duro por la abrasión que provoca el nuevo asfalto de Laguna Seca, también los japoneses se ven favorecidos (sobre todo pensando en el delantero). Vamos, como siempre, terminamos hablando de lo mismo. Reconozco que pensaba que tras sus dos terceros puestos en Alemania y Holanda, Hayden ganaría aquí. Esta mañana, en el warm up, se ha caído. La presión puede afectarle, o lanzarle. Veremos.

Esperando al domingo, que es lo mejor

Son algo más de las 6:30 de la mañana en San Francisco, y el jet-lag me tiene en pie desde hace una horita. La temperatura aquí es muy buena, pero dicen que a medida que nos adentremos hacia Monterey, subirán. Lo dije el otro día, todo el mundo está pendiente de la temperatura, porque puede ser un factor importante. Ahora, lo será para los que no ganen... Ayer en el avión venían sólo dos pilotos del Mundial (bueno, estaba también De Angelis como visitante, un futurible de MotoGP): Dani Pedrosa y Valentino Rossi. Mi sensación es que ellos dos son los que más miradas van a tener encima, y justo detrás, Hayden y Stoner. Sachsenring puede ser un buen referente: Pedrosa hizo aquí el año pasado, para mi gusto, una de sus carreras más excitantes desde que está en MotoGP, tirándose como un 'loco' por el sacacorchos; Rossi no ha ganado aquí, y lo de Alemania fue un pinchazo con un error que a lo mejor dicta que no está tan fuerte psicológicamente; Michelin funcionó mejor a altas temperaturas en Sachsenring, y aquí en 2006; Hayden ha ganado las dos veces que se ha corrido en Laguna Seca, y lleva dos terceros consecutivos; Stoner ha demostrado que cuando llegan las duras, también está ahí, ganándole la partida a otros dos Bridgestone como Melandri y Hopkins en la difícil carrera de Alemania. Muchas cosas que sólo el domingo, a las 14 aquí, a las 23 en Europa, se van a resolver. Mientras tanto, me duchará y aprovecharé para dar una vuelta en San Francisco, antes de coger la carretera 1 camino de Laguna Seca.

El Campeonato del Mundo de los Neumáticos

Este fin de semana ha sido complicado en cuanto a trabajo y no he podido dedicarle el tiempo al blog que me habría gustado. Me pasa demasiado últimamente. Mañana vuelo a San Francisco para visitar por primera vez en mi vida Laguna Seca. Ya os podréis imaginar que me apetece bastante. Pensando en la carrera de este fin de semana en Alemania, se me ha confirmado la sensación de que estamos ante el Campeonato del Mundo de Neumáticos. Primero tengo que decir que Dani Pedrosa dio una exhibición increíble. Obviamente no puedo hablar por él, pero intuyo que disfrutó como un enano. Casi se puede decir que ganó 'a lo Pedrosa'. Así lo hizo en Shanghai y en Donington Park en 2006, sin mirar atrás y sin que nadie le pudiese ni oler. Lo segundo que no quiero olvidar es lo de Valentino Rossi. En Assen estuvo magistral, y así se le reconoció; aquí, pese a los sobreesfuerzos que le obliga muchas veces a hacer su Yamaha (en Sachsenring parecía la peor MotoGP), cometió un error de Junior, por precipitación y por impaciencia a la hora de querer quitarse de enmedio a De Puniet. Y lo pagó.

Lo del Campeonato del Mundo de los Neumáticos lo decía porque los pilotos están quedándose demasiado hipotecados por la elección de gomas GP tras GP. Sólo hay que ver lo mal que lo pasaron los Bridgestone (menos Capirossi, un poco por la fortuna de que su compuesto más blando extrañamente funcionase mejor que el de resto de pilotos de la marca japonesa). Stoner y Melandri fueron los más vivos ejemplos, y como eran devorados por Hayden o Edwards. Hacía muchísimo calor en Sachsenring, y el asfaltado nuevo en algunas zonas del trazado alemán limaba los neumáticos (el máximo responsable de Bridgestone, Hiroshi Yamada, ya confesó una vez que a partir de cierta temperatura se ponía a temblar). Me encontré con un mecánico de Capirossi el lunes por la mañana, y me contaba que los neumáticos de Loris habían llegado destrozados por el lado izquierdo (hacia donde tienden la mayoría de curvas de Sachsenring). Hablo de memoria, pero creo que era en Turquía donde en las seis primeras posiciones llegaban seis Bridgestone, y alguno como Rossi las pasaba canutas para terminar la prueba. La nueva regla influye mucho, casi diría, demasiado. No sé si es lo mejor para el espectáculo que los pilotos tengan que cruzar los dedos para ver si los Michelin o los Bridgestone aguantan hasta el final. Que se lo preguntan, hasta Sachsenring, a Pedrosa. Y ya veremos Laguna Seca si el calor vuelve a ser extremo como parece que fue en los últimos dos años.

Pd: Intentaré ser más constante este fin de semana...

A pie de pista

Hay que reconocer que el fin de semana está resultando relativamente tranquilo aquí en Sachsenring (bueno, menos para los de la escudería de D'Antín, los dos Alex, con sus manos derechas machacadas). En los entrenamientos disputados hasta ahora la nota predominante es la normalidad, a la espera de que en algo más de una hora comiencen los oficiales que determinarán las parrillas. Por destacar algo, y ya no es destacable, Stoner anda dominando todos los tests, y mira que nos enpeñamos en postular las dificultades de Ducati cuando llegasen los circuitos pequeños y más revirados. Nada de nada. Me he bajado por la mañana a ver el entrenamiento de MotoGP a pie de pista, y por mucho que hablen de kartings los pilotos, la sensación en Schsenring es fantástica. La gran bajada de la parte de atrás es espectacular, y después toma el camino de la entrada a meta en cuesta arriba. Ahí me acuerdo que vi como Tamada tiraba a Roberts Jr. el año pasado. Voy a reconocer una cosa. Concentrado en desentrañar el reflejo que los pilotos ventilan cuando se bajan de la moto, y que terminan siendo su explicación a un buen o un mal tiempo, no he sido capaz de distinguir por qué, por ejemplo, Pedrosa rodaba casi un segundo más lento que Stoner, o dónde estaba el problema. Después, a cámara lenta o en un plano corto en televisión, las conclusiones son mucho más fáciles de sacar. Pero, a pie de pista, el medio segundo que puede diferenciar a uno de otro, sencillamente, no existe.

Cuando Casey Stoner lideraba la carrera en Assen con bastante distancia respecto al segundo, la sensación generalizada era la de que 'otra vez va a ganar este tío', pero creo que con dos matices: uno, va a liquidar el campeonato; el segundo, no era el que ninguno esperaba que estuviese haciendo esto a estas alturas. En cierta medida, un temor por el campeonato. Ganó Valentino Rossi, y ahora parece que las perspectivas en cuanto a expectativas deportivas aumentan para este fin de semana en Sachsenring. Aún así, es difícil imaginar ahora (sin lluvia de por medio) a otro vencedor que no sea uno de estos dos, algo que realmente empobrece la competición. De los que ganaron el año pasado en condiciones normales, Capirossi y Melandri no parecen capacitados ahora para esos objetivos; Hayden fue tercero en Holanda, pero nunca se le ha visto como a un ganador; el que mayores dudas levanta al respecto es Pedrosa, del que se supone que tendrá que regresar en algún momento. O sea, Yamaha, Ducati y Honda. Las otras dos fábricas, Kawasaki y Suzuki, que habían sorprendido gratamente con sus proyectos 800, no han terminado de explotar en el sentido deportivo. Y por eso son las dos escuderías con más prisas a la hora de hablar del futuro.

Suzuki parecía estar barajando aquello del equipo satélite Aspar-Schwantz-Elías, pero lo descartaron para no hipotecar su crecimiento con una moto más. Ahora tienen que ver si lo que tienen en el box les vale. Bueno, contando con que parece que John Hopkins ya ha firmado con Kawasaki. Parece que las motos verdes se plantean el año que viene tener una tercera unidad en su box, y estos sí que han sido muy claros en sus prisas por preparar 2008. Hopkins estaba siendo uno de los que más novias se estaba echando en las últimas semanas, y ahora ya le han cazado. Las piezas empiezan a colocarse. Hay una Suzuki libre, eso ya es seguro. Que sube Lorenzo a Yamaha, también. Y que Melandri no sigue en Honda, también. Es más que probable que Capirossi no seguirá en Ducati, y que Dovizioso (y algún otro, De Angelis por ejemplo) dejará el 250. El mercado está en ebullición. Con un Mundial en juego, por cierto.

Nicky puede pensar en Laguna

Después del GP de Cataluña me quedé unos día en Barcelona. El lunes en Montmeló estuvieron la mayoría de los pilotos de MotoGP entrenando. El martes unos pocos, entre ellos, Nicky Hayden. Hayden se marcó casi 100 vueltas, trabajando a destajo sobre su RC212V. Él es el campeón del mundo, y sin embargo, no ha recibido en ningún momento trato de número 1 en su box. Es algo que a nadie le ha extrañado porque, reconozcámolos, entre todos hemos devaluado su título. Andará a la altura del de Kenny Roberts Jr. Pero, no nos engañemos, el campeón del mundo de 2006 es él. Pese a esta falta de respeto evidente, Hayden ha seguido trabajando en la desesperación desde la pretemporada, recibiendo algunos de los avances de HRC después de que los hubiese probado Dani Pedrosa. Había que ver su cara por el paddock. Nicky sonríe porque es tremendamente afable y educado, pero cuando se le preguntaba por el tema, su rostro era un poema. Decía que en Montmeló trabajó a todo gas, y sin que se notase, su trabajo estaba dando resultados. Probó el chasis modificado de Pedrosa, ha trabajado con diferentes escapes, le llevaron varios embragues... De todo. La lluvia de Donington ocultó la mejoría del de Kentucky. Se cayó en carrera, pero en el primer libre había sido segundo a 32 milésimas de Stoner, en el segundo otra vez segundo a algo menos de cinco milésimas de Pedrosa, en el tercero fue primero y en el oficial cuarto. Valentino Rossi remontó desde el puesto 11 al 1 en Assen, y Hayden lo hizo desde el 13 hasta el 3, con una sensacional salida. Fue capaz de ganarle la partida a su compañero de escudería y recuperó la sonrisa. Probablemente Nicky Hayden no es el mejor piloto de la parrilla de MotoGP, pero sí que lo es en Laguna Seca. Faltan dos GGPP para llegar y ahora él ya puede pensar en su carrera.

Gasolina y electrónica

Primero una nota: la foto de éste post no tiene nada que ver con su temática, pero es que me la enseñó el otro día el fotógrafo italiano que la hizo y me pareció espectacular.

Lo del título está más que claro. La gran carrera del sábado dejó dos imágenes curiosas: el segundo y el tercero del podio se quedaron sin gasolina. A Stoner le tuvo que llevar en moto uno de los comisarios de pista dispuestos para esas circuntancias; a Hayden le remolcó Hopkins. El rendimiento del estadounidense sorprendió (más o menos, ya comentaré en próxima entrada mi opinión al respecto) en Assen, pero viendo cómo se las ha gastado este año Stoner-Ducati-Bridgestone, el fin de su carrera podría levantar la sospecha de que a lo mejor ese día no todo estaba como tenía que estar. E inmediatamente surge la pregunta de si Rossi le habría batido en el caso de que ese supuesto fuese verdad y no se hubiese dado. Nada de nada. La reducción de la capacidad del depósito de combustible de 22 litros a 21 para este 2007 nunca fue valorada como una regla determinante si se comparaba con la bajada de cilindrada o los neumáticos limitados. Me acuerdo de que en la pretemporada ya comentaba el propio Rossi que habría que exprimir el consumo casi hasta el último mililitro, pensando en que los motores pudiesen sacar la máxima potencia posible. Cuando Ducati empezó a valorar esto en las pruebas fue cuando le empezaron a surgir los problemas a Capirossi. La electrónica 'capaba' la moto, la hacía más dócil, con una entrega de potencia suave y que en nada se parecía a la bestia GP6 que Loris domesticaba. Esa electrónica es la que va regulando el consumo para que Casey llegue a la meta sin problemas. Él mismo reconocía que no había notado nada raro y que el comportamiento de la GP7 había seguido siendo el mismo. Hay variables que pueden hacer que la moto tenga que consumir más combustible. El viento fue uno no valorado en su justa medida que pudo participar en la parada final de la Ducati. Es difícil de saber. Los reyes de la electrónica son los únicos que tendrán una respuesta más o menos clara.

Y al final fue Valentino

Sé que entre los aficionados hay quienes creen que Pedrosa es un genio, y otros que no están tan convencidos. Quien piensa que lo de Stoner es talento puro, frente a los que opinarán que Ducati-Bridgestone hace mucho en el tema, demasiado. El que verá en Lorenzo a una fuerza de la naturaleza que va para genio, y otros que directamente no le soportarán por razones extra deportivas. Y hay muchos para los que Rossi es uno de los más grandes de la historia, y otros para los que tiene un punto falso y arrogante a parte de sus cualidades indiscutibles. Bueno, lo he leído por aquí, que conste. Pero creo que se sea del credo que se sea (insisto como he hecho otras veces que esa salsa le da vida a éste deporte), todo el mundo tendrá que reconocer la magna actuación de Rossi en Assen. Que no se le olvide a nadie una cosa: la Ducati funcionó a la perfección y no hubo demasiadas quejas sobre el rendimiento de los Bridgestone (no tan superiores ésta vez a los Michelin, cierto es). La historia es conocida: el italiano partió el once; tardó cuatro vueltas en atacar, hasta que los neumáticos empezaron a dar su rendimiento y cuando estaba a 5 segundos de Stoner; se quitó a todos de en medio; y le metió la rueda a Casey durante varias vueltas para, y es una interpretación propia, intentar desquiciarle por si le hacía cometer un fallo y le podía recortar más puntos que 5 en la general (bravo otra vez por Stoner). La victoria de Rossi en Assen ha sido monumental. En la tribuna principal de la ex Catedral (la primera mitad del circuito, no nos engañemos, es un churro; la segunda, bellísima) reinaban los tonos amarillos. Cada adelantamiento de Rossi era acompañado de una ovación, que iba in crescendo. Será lo que sea y como sea, pero Valentino desprende un algo que cautiva a las masas y que yo todavía no he podido percibir en nadie. Por eso sus gestas siempre son las más magnificadas.