La Vuelta al Mundo en MotoGP

viernes, junio 30, 2006

Mercadeo


Pasada en parte la fiebre de los lesionados (en parte porque Elías y Sete no están, Rossi sigue con molestias como Melandri, y Capirossi hasta no ha entrenado por la tarde para descansar), la segunda parte de la temporada empieza a ser un buen momento para comenzar a hablar de mercadeo. El mercado de fichajes no es que empiece a moverse ahora, es que los movimientos que ya se iniciaron hace unas cuantas semanas van poco a poco saliendo a la luz. Este post va a quedar un poco Marca, pero reconozco que el comadreo de abuelas este es divertido. Algunas cosas serán, y otras no, pero no os podéis imaginar las fuerzas que se gastan en esto por no quedarte con la sensación de ser el último que se entera de las cosas. Así que para que a nadie le pase eso, voy a dar pinceladas de cosillas que van sonando. Algunas me las tengo que quedar para mí, porque en los rincones del paddock se descubren cosas tras un juramento de boca cerrada, que obviamente no voy a romper.
Los cambios internos en MotoGP están poco definidos. El caramelo es Stoner. Lucio Cecchinello, que es el manager de su equipo, quiere mantenerlo a toda costa, pero tiene el problema de que le falta dinero. Stoner tiene como límite la carrera de Brno. Si ahí Lucio no le ha presentado algo firme, abrirá las orejas. Honda le quiere mantener, pero Yamaha está acechando: necesitan un piloto joven para continuar con el proyecto Rossi (y un autraliano le molaría mucho a Jeremy Burgess, técnico de Vale). A Edwards se le pone de vuelta en Superbikes, un campeonato donde le adoran. Y el que no las va a tener todas consigo va a ser Sete para seguir en Ducati. De 250 subirá alguno a MotoGP. El elegido es Dovizioso, con pinta de seguir en Honda (también Yamaha le quiere).
Se esperará en el cuarto de litro Jorge Lorenzo, pase lo que pase. También ha habido un montón de ofertas por él, desde Ducati a Honda (que últimamente aprieta, empujada por Repsol), aunque ahora mismo es Yamaha la mejor posicionada. El resto de 250 se mantienen, aunque que nadie espere ver a Lorenzo acompañado de Barberá en el box... En esta categoría quedan bastante en el aire las Honda oficiales porque, y es así, pocos las quieren. Tiene contrato para subirse a una Luthi, pero para las otras habrá muchos candidatos. Shuei Aoyama seguirá, por el contrato que le une a la fábrica por un año más, contrato que se le termina a Takahashi. Habrá que ver cómo se mueve hasta el final de temporada Martín Cárdenas, pero si no es un super crack, puede que con Alberto Puig y el equipo de Repsol se vaya Julito Simón (pese a que tiene contrato con KTM en el 250). Eso mismo pone en el contrato de Mika Kallio, que viendo cómo van las cosas debería tener de compañero a Hiroshi Aoyama. En Aprilia las cosas se definen: Lorenzo, Barberá y Simoncelli (también por contrato) tendrán las oficiales. Y las semi oficiles deberían ir, entre otros, para De Angelis y ¿Bautista? Si es campeón, claro. Imaginaros, sólo con esto, cómo está el panorama.
Porque habrá que encontrar líderes en 125, quién ocupará las monturas oficiales (entre ellas las KTM)... En fin, un lío que, insisto, cualquiera sabe cómo terminará pero que tiene su puntillo como divertimento.

lunes, junio 26, 2006

El parte médico


Me siento mal cuando abandono el blog, pero esto de llevar juntando carreras y viajes tan seguidos es demoledor. Prefiero cuando viajamos a Asia, pese a la distancia, porque es todo mucho más tranquilo. Este tirón Italia-Barcelona-Holanda ha sido especialmente intenso. Sobre todo con los accidentes. No he visto más partes médicos en toda mi vida... Sé que hay tópicos del estilo "los pilotos es que están hechos de otra pasta" y demás zarandajas, pero las caras de estos días no me recordaron a ninguna pasta muy distinta a la que tenemos el resto. Las carreras de Rossi, Melandri y Capirossi fueron entre épicas y angustiosas. Al que peor se le veía era a Loris, que en algunos momentos tenía pinta de no saber ni dónde estaba. Marco tenía la cara como si le hubiesen dado una paliza. Y a Valentino ya se le vió bastante. El primer día, cuando se bajó de la moto, parecía un espectro, blanco como la pared. No van a estar mucho mejor para Inglaterra, que nadie se engañe, estas cosas tienen que necesitar mucho más tiempo de recuperación. A estas alturas de la temporada, los que se ven con opciones de hacer algo, no quieren desaprovechar sus oportunidades. Y cómo está MotoGP, pese al tirón de Hayden en Assen, y conociendo lo que le cuesta ganar, nadie está descartado. Esos son los grandes nombres. Pero es que enumerando el parte general del Campeonato del Mundo, es para quedarse a cuadros:
- En 125cc, desde principio de año falta el italiano Bianco; luego está Julito Simón con el fémur roto (por lo menos no vuelve hasta agosto) y el japonés Koyama con la muñeca.
- En 250cc, Barberá se rompió el radio, pero ya estará en Donington; Heidolf se lesionó hace tiempo, como Sekiguchi y Danese; el otro día Palumbo y Cárdenas terminaron también con huesos rotos.
- En MotoGP, a parte de los que corren lisiados, Sete sigue recuperándose, más Elías que no volverá casi seguro hasta Alemania, a no ser que esta tarde-noche digan otra cosa.
Once pilotos. No recordaba un número tan alto. Alguien que estaba conmigo se preguntó: ¿hasta dónde se puede llegar con esto? ¿Quién decide que alguien puede correr con huesos rotos? Obviamente este es un deporte muy peligroso, pero el peligro alimenta la mística. Puede que sea otro de los pequeños detalles que hacen tan grande el motociclismo. Como que una sosa carrera entre dos americanos se vuelva loca en una vuelta y haga que todo el mundo termine quedándose alucinado con lo que ha visto... ¿no?

martes, junio 20, 2006

Querer ganar, ante todo


Álex Debón me parece un buen tipo, muy noble y muy luchador. Se ha estado peleando con motos mediocres llevándolas al límite por conseguir buenos resultados, que en su caso no eran otros que ser el primero de las motos no oficiales. Precisamente, ir al límite es lo que le ha llevado al suelo más de una vez, con consecuencias dolorosas en forma de lesiones que le han llenado el cuerpo de cicatrices. Debón decidió, creo que con tino, convertirse en probador oficial Aprilia, con la oportunidad de correr algunos GPs en la temporada. Él sabía que en esas carreras iba a tener la opción de lograr mejores resultados que en su vida, y así ha sido. Jerez fue su primera oportunidad, pero una lesión le impidió participar en la carrera. En Italia llegó su segundo momento y fue quinto, asomando por los puestos delanteros durante toda la prueba. Decía en la pretemporada que correría más carreras si Lorenzo o Barberá se lesionaban, y pasó. Con Héctor en casa por la fractura del brazo, Debón iba a disfrutar de más oportunidades. En Montmeló lo hizo francamente bien durante todo el fin de semana. Fue 1º el viernes y 3º el sábado. Pero al bajar de la moto ese segundo día, dijo una cosa que me sonó mal: "Voy a ayudar todo lo que pueda para que Jorge gane la carrera". ¿Uno de los tres pilotos más rápidos de la categoría no iba a luchar por la victoria? Lo confirmó el domingo. Cito textualmente: "He salido muy bien y tenía muy buen ritmo, pero tenía órdenes de equipo de ir con Jorge. Al no verle detrás de mí me he quedado a esperarle". ¿Esto qué es? ¿Ciclismo? ¿Órdenes de equipo en la carrera 7 de 16? Me parece bien que Álex le esté agradecido a su representante y manager de equipo, Dani Amatriain, pero un deportista no puede renunciar así como así a un éxito, y menos cuando tienes tan pocas oportunidades. Así va a parecer que en el equipo estarán deseando que Barberá no se recupere para tenerlo todo tan atado... Es una opinión mía, pero no me gusta.
Por cierto, no tiene nada que ver, pero vaya carrusel de cambios que hay en Assen, a donde vuelo mañana. Debón va a estar por Barberá; Hoffman va a sustituir a Gibernau, que como pronto no vuelve hasta Alemania; por el alemán va a correr Iván Silva, del Campeonato de España; el sitio de Porto se lo ha quedado el colombiano Martín Cárdenas; el de Cárdenas lo va a ocupar Aleix Espargaró que así evitará encontrarse con su hermano en Brno y podrá tener la opción de caber en su moto y de salir del bache en el que está; por Aleix va a entrar Tito Rabat, otro que viene de nuestro campeonato nacional y que ya fue piloto invitado en Montmeló; y no sé a quién van a poner en KTM en el lugar de Simón... En fin, muchas cosas nuevas para empezar.

lunes, junio 19, 2006

Imágenes en la retina


El post de hoy está escrito anoche. Pero tuvimos un problema con la conexión de red y no lo pude colgar. Acabo de llegar a casa de Montmeló y he decidido subirlo:
Es la 1:20 de la mañana y escribo desde la sala de prensa. Acabo de terminar de trabajar y, repasando lo que he visto aquí este fin de semana me he dado cuenta de que hay muchas imágenes que se me han quedado grabadas en la retina.
El primer día recibí la visita de un compañero de trabajo que además es entrenador de atletas. Me había pedido que le organizase un encuentro entre una chica que está entre las tres mejores velocistas juniors de España y Pedrosa. A Montse, que así se llama, le encantan las motos, y su ídolo es Dani. Reconozco que Pedrosa tiene, en general, un trato frío con la gente. Con lo reservado que es uno nunca sabe cómo piensa realmente. Con Montse, y a lo mejor porque es una deportista como él, le vi simpático, y no diría tanto como hablador pero sí muy comunicativo.
El viernes, mi segundo día aquí, conocí a Kevin Schwantz. Me sorprendió la normalidad y la naturalidad con la que se mueve uno de los mitos de este deporte. Hablamos de motos, hablamos de Rossi, hablamos de Pedrosa y Stoner... En Schwantz se percibía otro tipo de deportista, distinto al que solemos ver hoy en día. En Schwantz se respiraban toneladas de motociclismo.
En mi tercer día pasé un rato con dos pilotos con los que me llevo muy bien: Nico Terol, que está pasando una temporada muy dura y que por fin sonreía; y Aleix Espargaró, que también está teniendo un año jodidísimo y que no puede ni sonreir.
De hoy hay poco que decir en cuanto a imágenes en la retina. Sólo hay que mirar arriba. Escalofriante. Os recomiendo que busquéis en las revistas de motos que salen los martes, algún detalle de Melandri arrastrado por la moto de Pedrosa con su brazo enganchado en el basculante. Muy impactante. Milagroso. Buenas noches.
Ahora más bien, buenas tardes

sábado, junio 17, 2006

Extraño


Los GP de casa son más difíciles para trabajar. Normalmente hay más expectación, eso para empezar. Y luego la vida social es mayor, lo que quita tiempo. Las sensaciones que está dejando de momento el fin de semana son raras. Se supone que las gradas de Montmeló van a estar a tope, pero todavía no se respira ambientazo. Como nos levantamos con un solazo, y luego se nos caen encima las nubes y la lluvia, el devenir de la competición está siendo un tanto extraña. Bueno, no en MotoGP que de momento marcha con tranquilidad. Se supone que Rossi es aquí el más fuerte, le encanta el circuito y se siente recuperado tras la victoria de Mugello. Así que verle el primero es síntoma de normalidad. Pedrosa también está arriba, todos le miran a él y que no falle también ayuda a la placidez.
En 250 es donde me vienen las primeras sensaciones extrañas de las que hablaba. Falta Barberá, y eso descafeinaba a priori las posibilidades de los pilotos españoles. Encima el jueves Porto anunció por sorpresa que lo dejaba. ¡Con 27 años y en una primera temporada mala, o tercio de temporada malo, y se rinde! Me quedé bastante chocado con esto y aún lo sigo estando, porque hay cosas que se me escapan. La despedida del argentino fue fiel reflejo de lo que es: un tipo educado al que todos respetan, pero lo suficientemente distante como para no mostrar excesivamente sus sentimientos. Ahora hay que subir a esa Honda oficial a otro piloto. Por aquí se rumorean dos: el australiano West y Julito Simón (sí, es piloto de Puig y ha confesado varias veces que la 125 le queda pequeña porque es corpulento, aunque el tema siempre va a depender de lo que diga KTM, con quien tiene contrato). Movidito todo. También es extraño, pero bueno, ver a Álex Debón con la pole provisional. Este invierno estuve en Alcoy con varios pilotos haciendo un poco de deporte en un ambiente bastante divertido. Uno de ellos era Debón. Me decía que con las motos privadas con las que le había tocado correr en su carrera se veía obligado a ir siempre al límite para pelear sólo por ser quinto o sexto, y que eso era duro. Ahora con la oficial demuestra lo que él quería.
También está siendo extraño el 125. Con cinco minutos de entrenamiento en seco se pone a llover, y pilla a unos cuantos desprevenidos. Resultado: Bautista está el 36, y en primera fila vemos al debutante Conti. Como llueva esta tarde antes de las 13:15, hora del oficial, va a quedar una parrilla casi diría que desastrosa para la carrera (no lo pensarán así Kallio y Luthi que están primero y segundo). A esto de los entrenamientos se suma el triángulo Aleix Espargaró-Pol Espargaró-Nico Terol. Me explico. Aleix no está bien, no le sale nada y está bloqueado. llega su hermano Pol y todos a preguntarle por él, y encima de tres tandas que llevamos, dos se las ha llevado el pequeño. Luego se empieza a hablar de que, viendo cómo se las gasta el pequeño Espargaró, a lo mejor le dan la Derbi del Mundial y descabalgan a Terol. Y Terol en seco fue 10º ayer y 5º esta mañana... Muy tenso el tema, y muy extraño.

martes, junio 13, 2006

El mejor no tiene porque ser el campeón


¿Quién es el mejor piloto de la categoría? Esta es una pregunta cargada de relativismo, muchas veces meramente opinable. ¿Quién es el campeón de la categoría? Esta es otra pregunta con una respuesta totalmente objetiva: el que suma más puntos. Ayer operaron a Héctor Barberá de una fractura en su brazo derecho mientras entrenaba el domingo. En algún periódico se leía que esto le dejaba casi sin opciones de luchar por el título. Hace poco menos de 10 días, Jorge Lorenzo lograba su tercera victoria de la temporada: el 50 por ciento de las carreras del año han sido suyas. Entre Jerez y Qatar, escenarios de sus dos primeros triunfos, y Mugello, donde sumaba el tercero, dos caídas y un cuarto puesto lleno de ira, rabietas, polémicas, fanfarronería... Para la mayoría de “entendidos” con los que voy hablando durante el año no hay duda de que Lorenzo y Barberá son los dos pilotos de 250cc con más talento. Para unos Jorge; para otros Héctor. Descaro, toques de genialidad, espectáculo. En cualquier quiniela que saliese de la pretemporada sus nombres estaban en lo más alto. Pero ninguno de los dos lidera la general. Eso corresponde a otro piloto, a Andrea Dovizioso. Si hablamos de talento o calidad (conceptos determinantes que deberían definir a “el mejor”), puede que Andrea no salga vencedor respecto a algunos de sus rivales. Dovizioso lo que tiene es la cabeza de campeón de otros no tienen. Puede no ser el mejor, pero es el que mejor lo tiene para ser campeón. Eso es lo que queda para la historia. En su primer año en 250 no ganó ni una carrera. Se convirtió en el espectador del mini duelo Pedrosa-Stoner (no nos engañemos, el australiano le duró poco a Dani), y mientras tanto fue líder del Mundial, y subiendo tan solo 5 veces al podio terminó tercero. En 2004 en 125 estaban Stoner, el que sorprende a todos en MotoGP, también Barberá, Lorenzo y un campeón del Mundo como Locatelli. Miremos su año: Sudáfrica 1º; Jerez 4º; Francia 1º; Italia 4º; Montmeló 2º; Holanda 4º; Brasil 3º; Alemania 4º; Inglaterra 1º; Brno 2º; Portugal, se tuvo que retirar cuando era líder por un pinchazo; Japón 1º; Qatar 2º; Malasia 2º; Australia 1º; Valencia 2º. 91 puntos al segundo en la general. Una regularidad aplastante. En este año no ha hecho poles, no ha ganado ninguna carrera (hasta en el duelo con su compañero Takahashi perdió)... Pero: Jerez 3º; Qatar 2º; Turquía 3º; China 2º; Francia 2º; Italia 3º. 20 puntos de ventaja sobre el segundo clasificado en la general. ¿No se parece a algo? Si seguimos así, en Valencia diremos: “No es el mejor, pero él es el Campeón del Mundo”. Así es Andrea Dovizioso.

viernes, junio 09, 2006

¡Malditos neumáticos!


El remordimiento por no haber actualizado el blog, y las ganas, me ha hecho incluir hoy dos posts en vez de uno. Este viene a cuento porque me está dando la sensación de que, en MotoGP, se está hablando más que nunca de neumáticos. Y como no es para bien, esto deja un poco con el culo al aire a los tres fabricantes que operan en la clase reina: Michelin, Bridgestone y Dunlop. Los dos últimos están en evolución todavía, así que el suministrador francés tiene algo de ventaja en esto. Encima tiene la nómina de pilotos más amplia: Melandri, Pedrosa, Stoner, Hayden, Edwards, Tamada, Elías, Roberts y Rossi. Lo más grave para Michelin vino con el neumático delantero defectuoso de Valentino en China. Gran cagada. Las Yamaha son las que más se están quejando este año con el nuevo chasis y todos los problemas de chattering pero, no nos engañemos, también los pilotos buscan excusas para malos resultados hasta debajo de las piedras. Y si os fijáis en el post-carrera, encontraréis muchos hablando de las gomas. Bridgestone es la segunda marca en número de pilotos. Los japoneses suelen adolecer de calidad para circuitos puntuales, y funcionan muy bien para otros. Eso hace que la palabra “neumático” sea muy frecuente en los chicos Bridgestone. A saber: Capirossi, Gibernau, Vermeulen, Nakano, Hopkins y De Puniet. Estos tienen más razones para las quejas, pero me imagino cómo deben sentirse los ingenieros cuando ponen a parir su producto. Bridgestone llegó a tener presencia en 250 y 125, pero su rendimiento estaba muy por debajo del de Dunlop. Una cosa buena tenían en 125, y es que eran unos “chupones” cuando llovía. Se agarraban de manera increíble y sus pilotos eran capaces de rodar un segundo más rápido que sus rivales. El hito fue Australia 2003 con un podio con Ballerini y Azuma en los dos primeros puestos. Ahí es nada. La última fábrica metida en este tinglado es Dunlop, la reina en las otras dos categorías. No se puede prever cómo terminará su historia en la categoría, pero están haciendo algo así como el ridículo. Digo yo, si vemos que sus cuatro pilotos están siempre en las cuatro últimas posiciones de carrera: Checa, Ellison, Hofmann y Cardoso. Y estos pobres si que pueden echar pestes de lo que calzan. Porque clama al cielo. El ejemplo más sangrante es el de Checa. El año pasado terminó muy bien con la Ducati. Aceptó que no le renovasen para meter a Sete. Era un piloto apetecible para cualquiera y Sito Pons le cazó. Pero con todo el lío que se montó con el patrocinador Carlos se quedó en la calle. Su única opción ha sido la del equipo Tech 3 como oficial Dunlop. Uno nunca sabe si es mejor estar así o no estar. Bueno, Checa piensa que es mejor estar y, supongo que eso es lo que vale.

Resaca tardía


Tener un blog te permite poder escribir lo que quieras y cuando quieras. Una maravilla. Tener estropeada la conexión a internet te lo fastidia todo en un periquete. En fin, no tengo nadie a quien decir nada, pero no me gusta tardar tanto en actualizarlo. Y menos después de las carreras del domingo. ¡Qué pasada! De lo mejorcito que he visto como espectáculo completo en los 4 años que llevo haciendo esto del Mundial. Como las carreras están bastante vistas y comentadas, me quedaré con detalles. Son detalles de lo que comentábamos el grupo de gente que vemos juntos cada una de las pruebas.
En 125 todavía nos impresionábamos de la regularidad de Álvaro Bautista, que no fallado ni una vez: ha estado en disposición de ganar las seis carreras que llevamos. Esta vez fue una milésima. Le pregunté a cuánto calculaba más o menos que iba cuando pasó la línea de meta. Me dijo que a unos 200km/h, así que hice una regla de tres y me salieron unos 5cm. Un compañero encontró el dato exacto de velocidad dado por la telemetría y encontró 5,7cm. Vaya cosas que buscamos… Por lo visto, y no lo he probado, en internet puedes descubrir que un mechero Bic de los pequeños mide 5,7cm. Una curiosidad. Alguno dirá, una chorrada.
En 250 comentamos un par de cosas. Una, obviamente, la victoria de Lorenzo y lo que traía consigo. Desagradable. En esto de Lorenzo lo que no me gustó fue lo solo que parecía sentirse Barberá con el protagonismo desmadrado que abarcó su compañero con esta “especial” victoria. Lo otro que hablamos era más gracioso. Hablamos de Jordi Carchano. Que conste que no tengo nada en su contra. Pero está en el Mundial a base de pasta, la que tiene su padre. La última viene por su cambio de equipo. Corría con una Honda de una escudería española que se llama Stop & Go. Decidió que el problema era la moto, así que le pidió a papá una Aprilia, con la que afirmaba rotundo que podía ganar. O estar arriba, más bien. Después de dejar medio tirados a su antiguo equipo, se vio este fin de semana en la tesitura de vivir una especie de cutre duelo con el piloto que había cogido su Honda, un argentino de nombre Fabrizio Perren que no se había subido a una 250 en su vida y que encima lo tenía que hacer en el dificilísimo Mugello, para añadir algo más, territorio Aprilia. Carchano no estuvo delante de Perren prácticamente en ningún entrenamiento y en la carrera, el catalán se cayó dos veces, mientras que el argentino sumaba un puntito. Lo que no había conseguido con esa misma moto Carchano en 4 carreras. Da que pensar.
Para cerrar, en MotoGP sólo recuerdo esto: ¡qué bien nos lo pasamos!

viernes, junio 02, 2006

¿Los pies fuera del tiesto?


Ayer llegué a Italia y, ya no sé ni como, me quedé sin tiempo de nada y no pude escribir ninguna entrada de recién llegado. Reconozco que Mugello, puede que junto a Phillip Island, es uno de los circuitos del Mundial que más me gustan. Está cerca de Florencia y, para que se haga una idea el que no lo conozca, revisad por ejemplo la película "Mucho ruido y pocas nueces" e imaginaros metiendo un circuito en medio de esos paisajes de la Toscana. Si a esto le añades un trazado técnico, con curvas preciosas, una recta más o menos larga, y subidas y bajadas entre montes y verde, te encuentras con un entorno magnífico.
El ambiente motero de Mugello es comparable al que vemos en Jerez o Valencia, lleno hasta la bandera y afición caliente moviéndose por la zona desde el jueves. El del paddock ha sido de reencuentro tras 10 días de paz por un lado (no es mucho tampoco) y de mucho movimiento por otro. Rossi se quedaba en MotoGP y después decía que seguía con Yamaha. Los rivales ponían cara de emoción señalando que qué bien que se quede, aunque de mucho no nos lo creeremos. El que me pareció más sincero, la verdad, fue Dani Pedrosa. Debe de ser mucho mejor ganar cuando están los mejores para que luego nadie diga "Sí, pero no estaba Rossi...". Mugello es territorio de dominio italiano y eso hace que siempre vengamos con ganas de triunfar en casa del enemigo. Me he encontrado más cosas en esta reentrada: Battaini, que abandonó MotoGP para irse a Superbikes, ha dejado Superbikes para meterse en el 250. Un poco raro (ha terminado el 16 a 1,7" de la pole); dos pilotos checos del mismo equipo, AB Cardion que a pocos les sonará, se han puesto 1º en 250, Smrz, y 3º en 125, Abraham; Mateo Túnez no ha venido por falta de motivación (de eso hablaré en otro post, creo): Alex Debón, que este año es probador de Aprilia fábrica, ha tenido un gran día y se ha puesto 5º; y para el final dejaré lo del asunto Lorenzo, que es por lo que el post se titula como se titula.
El padre de Jorge, Chicho Lorenzo, ha hablado en un par de radios diciendo, más o menos y en resumen, que Dani Amatriaín (manager del piloto y del equipo en el que milita) tiene secuestrado a su hijo, que le ha lavado el cerebro, que le controla el dinero a su antojo, que está perjudicando la carrera de Jorge y alejándole de la familia. Se están empezando a decir bastantes cosas sobre esto, y están lanzándose a la arena los opinadores. Sólo quiero trasladar un pensamiento, que es el mayoritario dentro del paddock: a nadie le debería interesar un asunto de familia que nadie está capacitado para demostrar y que lo único que puede terminar haciendo es golpear la moral de un piloto con un gran talento, que puede hacer grandes cosas, pero que siempre se ha caracterizado por tener un carácter, digamos, complicado. Es lo que pienso.
Y para terminar una aclaración: pongo una foto de Simón que no pega nada con lo escrito porque, para un día que termina primero, qué menos, que es muy buen chaval.