Viejos fantasmas

Brno ha terminado de resucitar algunos de los fantasmas del año pasado. Dos razones se dieron para que ganase Casey Stoner el Mundial, con un sabor de injusticia hacia sus méritos, y criticadas por muchos como excusas ‘baratas’ de los perdedores. La primera fue la electrónica, que sigue de moda todavía este 2008. La principal razón puede ser la voz poderosa de Valentino Rossi, cuando no gana, claro. La segunda, los neumáticos, un debate desaparecido con un supuesto paso hacia delante de Michelin tras unos pequeños cambios en la normativa. Dani Pedrosa ha ganado dos carreras, Jorge Lorenzo otra, y eso ha hecho que nadie se acordase del asunto. Hasta estas últimas tres carreras. El fantasma de los neumáticos ha resucitado.
El fantástico duelo Stoner-Rossi de Laguna Seca tapó en parte el ridículo que Michelin estaba haciendo, por segundo año consecutivo, en el trazado californiano. Ya en Alemania la cosa pintaba mal, pero la lluvia del domingo calmó la cosa. Eso sí, el podio completo fue Bridgestone, al igual que en EEUU. Ayer aquí en Brno era complicado encontrarse un Michelin en las primeras posiciones. Colin Edwards, séptimo, fue el mejor en el cómputo global del día, y el único entre los diez primeros. Su ritmo, o el de Jorge Lorenzo, estaba entre un segundo y un segundo y medio por debajo del de los mejores. Otra señal. Shinya Nakano, que desde esta carrera ejerce las veces de probador de HRC utilizando la moto de Pedrosa, estuvo siempre delante. La misma moto que Dani, distintos neumáticos. Este cambio en la política de HRC ha dejado una pista que muchos empiezan a seguir: ¿no estará probando también Honda su moto buena con los neumáticos buenos para decidir un posible cambio para 2009? Y eso que Bridgestone todavía no ha podido traerle a Nakano neumáticos a la medida, algo que hará en breve cuando haya recopilado toda la información del piloto japonés.
Pedrosa no critica abiertamente a Michelin, pero sí que pone caras cuando le hablan del tema. Lorenzo aplica la máxima de ‘esto es lo que tengo y con esto tengo que correr’, pero dejando claro que lo que tiene es peor que lo que tienen los demás. Desde Dorna se afirma, cuando toca hablar de electrónica, que este es un campeonato de motos y de pilotos, no de neumáticos. Y mientras en Michelin no saben salir del bache. Renacen viejos fantasmas y, si las cosas no mejoran, quién sabe si no volverá a replantearse aquella pregunta que surgió en Motegi el año pasado sobre el campeonato monomarca…
El fantástico duelo Stoner-Rossi de Laguna Seca tapó en parte el ridículo que Michelin estaba haciendo, por segundo año consecutivo, en el trazado californiano. Ya en Alemania la cosa pintaba mal, pero la lluvia del domingo calmó la cosa. Eso sí, el podio completo fue Bridgestone, al igual que en EEUU. Ayer aquí en Brno era complicado encontrarse un Michelin en las primeras posiciones. Colin Edwards, séptimo, fue el mejor en el cómputo global del día, y el único entre los diez primeros. Su ritmo, o el de Jorge Lorenzo, estaba entre un segundo y un segundo y medio por debajo del de los mejores. Otra señal. Shinya Nakano, que desde esta carrera ejerce las veces de probador de HRC utilizando la moto de Pedrosa, estuvo siempre delante. La misma moto que Dani, distintos neumáticos. Este cambio en la política de HRC ha dejado una pista que muchos empiezan a seguir: ¿no estará probando también Honda su moto buena con los neumáticos buenos para decidir un posible cambio para 2009? Y eso que Bridgestone todavía no ha podido traerle a Nakano neumáticos a la medida, algo que hará en breve cuando haya recopilado toda la información del piloto japonés.
Pedrosa no critica abiertamente a Michelin, pero sí que pone caras cuando le hablan del tema. Lorenzo aplica la máxima de ‘esto es lo que tengo y con esto tengo que correr’, pero dejando claro que lo que tiene es peor que lo que tienen los demás. Desde Dorna se afirma, cuando toca hablar de electrónica, que este es un campeonato de motos y de pilotos, no de neumáticos. Y mientras en Michelin no saben salir del bache. Renacen viejos fantasmas y, si las cosas no mejoran, quién sabe si no volverá a replantearse aquella pregunta que surgió en Motegi el año pasado sobre el campeonato monomarca…